7 AÑOS DESPUÉS. POR QUÉ DEDICARME A LA RSC HA SIDO LA MEJOR ELECCIÓN PROFESIONAL DE MI VIDA

cambio

Hace siete años di un giro radical a mi vida profesional.

Decidí abandonar el trabajo social con infancia y familia; especialidad en dónde me había formado y trabajado durante más de diez años; para buscar una vida mejor.

¿Qué fue lo que me empujó a hacerlo? Ver la situación de mis compañeras de trabajo 10 años mayores que yo. La mayoría se sentían frustradas y tenían escasas esperanzas de encontrar la estabilidad laboral y financiera que querían.

Eran un espejo en el que yo no quería reconocerme en el futuro.

 

Bien, Almudena…¿y entonces qué?, vamos a pensar que hacemos….

Ante mí vi tres opciones:

1) Emigrar en busca de un trabajo y vida mejor: Esta opción la cogieron en tropel miles y miles de trabajadores sociales españoles en el 2013. Estábamos en plena crisis y los milenialls nos comimos lo peor. Por suerte las historias de feedback que llegaban de Inglaterra, Educador, hasta de Dubai eran alentadoras. Aquí hay una salida decente para establecer tu propia vida de adulta. Tomé nota y puse esta opción en el montoncito de “posibles”.

2) Estudiar oposiciones de Trabajo Social. En realidad, siempre había pensado que era la mejor opción para mí. Fui cuidadosamente adiestrada por mis padres para que esta opción me pareciese la mejor. (o en su defecto, la anterior, pero siempre para emigrar a países de habla inglesa). Para mí fue una sorpresa agridulce darme cuenta al terminar la carrera de que no me apetecía opositar. Además, la vida me puso muy fácil encontrar trabajo recién egresada a pesar de la supercrisis (me rio yo de esa crisis del 2008, ya voy preparando el cuerpo para la que viene ahora tras el Coronavirus). La realidad es que mi experiencia en los Servicios Sociales Comunitarios durante las prácticas de la carrera no me gustó nada. De nuevo el espejo en el que reflejarme (las trabajadoras sociales y educadoras sociales del centro) no me gustaba. Las veía desmotivadas, medio calvas por el estrés y me daban mal rollo. La única que no encajaba en esta imagen; la directora; que tenía un aura mucho más positiva y empoderada que las demás (escogí ese centro por ella) estuvo casi todo el tiempo que duraron mis prácticas de baja por depresión. Yo hago más caso a mi intuición que a mi razón y en ese momento intuí que si tomaba el camino público en el mejor de los casos sería como la directora y en el peor como la media de trabajadoras sociales de allí. No es mi ecosistema y punto. Si alguna vez aspiro a ser funcionaria será de otra profesión, los Servicios Sociales no son para mí.

En cambio hay gente que prospera en esos medios como Rocío Damas, que florece en los Servicios Sociales como un geranio bien cuidado en primavera.

3) Trabajo Social Empresarial: La opción más desconocida para mi en ese momento. Lo conocí gracias a mi padre (en su empresa trabajan conFirma Quattro Trabajo Social) y fue él quien me habló de ellas. Aunque no tuve éxito en trabajar con ellas como empleada, si conocí en persona a Ana Hernández me dio muchas pistas y una serie de casualidades propiciaron que yo me interesase por la Responsabilidad Social y Corporativa.

Y de nuevo aquí, 7 años después de ese momento de cambio profesional, me gustaría contaros porqué no me arrepiento de hacer tomado la tercera opción:

  1. He adquirido unas competencias transversales increíbles: La Almudena de ahora no tiene nada que ver con la Almudena que empezó. La Almudena de ahora me parece una “superalmudena”. La Almudena de ahora no le tiembla el pulso cuando se reúne con Directores de RRHH de las más poderosas empresas del mundo para acompañarles en el proceso de implementar la FP Dual. Ni cuando expone en una reunión con las empresas más importantes de Andalucía, ni cuando tiene que dar una charla a 100 personas, ni cuando imparte un Webinar en donde sabe que habrá mucha gente. Mi capacidad de comunicación y saber estar ha mejorado un 300% en estos 7 años. También puedo crear campañas online y páginas web de cero. Viajar por Andalucía simplemente para una reunión importante (antes era una conductora horrible y pensaba sinceramente, que mi futuro era morir en un accidente mientras conducía) trabajo en equipo felizmente con profesionales cuyas personalidades y conocimientos son diametralmente opuestos a los míos, me comunico y entiendo con Políticos de toda clase… temas que a la Almudena del pasado le daban pánico. Dedicarme a la RSC durante todo este tiempo me ha obligado a desarrollar todo esto.

 

  1. Soy autónoma, yo me gestiono mi trabajo. Esto ha sido una gran sorpresa para mí disfrutar este punto. Es verdad que soy una autónoma privilegiada. Que uno de tus clientes facture tantas horas de forma regular no es corriente. Es el santo Grial para los autónomos. Por eso toco madera para que esta situación dure y dure. Pero me encanta esta forma de trabajar. Tu eliges tu horario, las horas que quieres trabajar y con quien. Esta sensación de libertad tan grande es la que describe tan bien Fernando Trias de bes en el libro Negro del Emprendedor. Elegir dedicarme a la RSC fue elegir formarme en temas empresariales, de emprendimiento y de comunicación.

 

  1. Tengo una conciliación personal-laboral excelente: Si hubiera elegido la primera opción con toda probabilidad hubiera roto con mi novio actual. La tercera opción hubiese facilitado la conciliación también, lo que no me esperaba era que la opción de la RSC me la facilitase, pero así ha sido. Escribo estas palabras el 1 de mayo. Día del trabajo. Y sinceramente, lo que me hacía ilusión del día de hoy (dado que por la cuarentena no me puedo escapar a la playa) era trabajar. Pero mientras estoy aquí escribiendo, mi ropa interior está girando dentro de la lavadora.

Con esto quiero decir que en mi día a día puedo permitirme poner lavadoras en mi hora de trabajo, atender al del butano o incluso tomarme descansos si lo necesito. Lo importante es trabajar las horas que facturo y cumplir los objetivos que me pongo. En mi experiencia, hay un porcentaje de autónomos que concilian más que nadie. Mejor incluso que los funcionarios. Somos escasos y raros como los unicornios, pero existimos. Mi objetivo vital es continuar en este grupo el resto de mi vida.

  1. Gano más dinero que nunca. Siendo sinceros, tampoco mi trayectoria profesional es muy extensa. Y en este punto ha sido imprescindible el trabajo que comencé cambiando mis creencias inconscientes sobre el dinero con 26 años con el método de Psych K. El trabajo social había hecho mucha mella en mi percepción del mundo. (Aunque creo que suele ser al contrario, los que tenemos creencias chungas sobre el dinero nos sentimos atraídos hacia la carrera de Trabajo Social) trabajar durante tanto tiempo con personas con tan mala situación económica me hizo pensar que ganar dinero era complicadísimo. Casi un milagro. Ahora no lo creo. Mi relación con el dinero se ha vuelto sana. No lo idolatro, pero tampoco lo pongo en un pedestal. Eso facilita mucho mi trabajo de captación de nuevos clientes y a la hora de hacer las inversiones que tenga que hacer.

 

  1. Me siento tranquila respecto al futuro. La Almudena de hace 7 años tenía un miedo exagerado al futuro. Todo cambio lo percibía negativamente. Ahora que he adquirido tantas competencias y me he enfrentado a tantos de mis miedos, no temo vivir más crisis económica o darle otro giro de 180º a mi carrera profesional. Creo sinceramente, que la RSC seguirá en alza y que los conocimientos y las competencias asociadas a la RSC serán cada vez más necesarias. La preocupación por la sostenibilidad, la colaboración entre empresas, administración pública y sector no lucrativo irá a más. A estas alturas no podemos permitirnos otra cosa. No podemos permitirnos no entendernos entre nosotros. La RSC ayuda a esto. A ser transparentes, a ser éticos a ser colaboradores de buena fe. A aceptar la ambigüedad y trabajar con ella (dentro y fuera de cada uno). La RSC va conmigo y no me importa si en algún momento vuelvo a trabajar limpiando casas o atendiendo extranjeros de Airbnb o directamente no tengo trabajo. Soy Trabajadora Social y Técnica de RSC, tengo la tranquilidad de que estos conocimientos son valiosos y que aportarán valor esté en el trabajo que esté.

Este artículo nace de la reflexión de vida que he hecho durante la cuarentena del coronavirus. Es un momento estupendo para mirarse uno mismo. Gracias a esta evaluación he vuelto a poner en valor mi curso Online. La verdad, pensaba no ofertar más este curso a pesar de que no me han faltado alumnos. Me daba pereza. Era como un tema del pasado. Sin embargo, el hecho de tener a gente solicitando entrar en el grupo de Facebook de Trabajo Social y Responsabilidad Social Corporativa cada día, me hizo replantearme esta idea. Hace falta más formación y conocimiento de RSC entre los profesionales del Trabajo Social. Creo que este interés es positivo y esperanzador para el futuro de la profesión. Tenemos mucho que decir y mucho que hacer en este aspecto.

No puedo prometer que en 2027 mis alumnos/as revisen su vida profesional y comprueben que formarse en RSC les ha dado los mismos frutos dulces que a mí. Es imposible. Cada trayectoria es única y mi carrera profesional ha estada marcada por una fuerte exigencia de trabajo personal (emocional, psicológico y hasta espiritual si soy sincera) a la vez que esfuerzo profesional.

Pero si puedo darte una ayudita en tu trayectoria si me dejas. La misma ayuda que me dieron a mi otros trabajadores sociales y trabajadoras sociales de toda España que me ayudaron a dar forma a mi proyecto profesional (haré un post sobre este tema).

El curso estará disponible desde ahora hasta julio. En agosto estará cerrado y no sabré cuando volveré a tener disponibilidad para abrirlo de nuevo (quien avisa no es traidor).

Podeis descargar la info aquí y aquí podéis apuntaros directamente: Apuntarme al Curso de RSC y Trabajo Social.

«Vale Almudena, ¿en serio nos vamos a creer que todo ha sido Happy Flower en tu camino por la RSC? »

Para nada, hay  un par de post en donde cuento mis experiencias chungas. Este éste

Pero este post es sobre la valoración de la experiencia en general, y sinceramente, la considero muy buena.

¿y tú? ¿Cómo va tu examen existencial durante la cuarentena? ¿te arrepientes de alguna decisión profesional? ¿o cual fué tu mejor decisión?

¡Eres libre de comentar!

Nueva sección del blog: Mis recursos favoritos para trabajad@res sociales en el mes de mayo:

Guía Fundación Adecco «20 competencias contra la exclusión social en el empleo»

Tesis de Pablo Barranco » Emprendimiento en Trabajo Social»

Guía de la Metodología del Programa Incorpora

 

 

3 comentarios en “7 AÑOS DESPUÉS. POR QUÉ DEDICARME A LA RSC HA SIDO LA MEJOR ELECCIÓN PROFESIONAL DE MI VIDA

  1. Hola Almudena me emociona muchisimo leer tus palabras y que compartas con nosotros tus crecimiento profesional.
    Estoy interesada en tu curso on line sólo que tengo varias dudas, quisiers me pudieras ayudar a resolverlas. Felicidades y bonito día!!

  2. Hola Almudena, leyendo tu historia y teniendo en cuenta mi situación me gustaría hacerte unas preguntas para ver si las puedes resolver ya que he buscado por internet y no encuentro opiniones.

    Estoy terminando la carrera de Trabajo Social y me estoy planteando realizar un máster pero me estoy decantado por dos en concreto y realmente no sé bien por cual decidirme; uno sería de responsabilidad social corporativa y el otro, de Sistemas Integrados de Gestión de la Prevención de Riesgos Laborales, la Calidad, el Medio Ambiente y la Responsabilidad Social Corporativa (SIG), ahora bien, ¿cúal crees (que estás metida en el tema) que podría tener más salida de cara a encontrar trabajo? Muchas gracias!!!

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