El mes que viene, en Octubre, termino una fase en mi vida clave: por fin, terminaré el máster de Sostenibilidad y Responsabilidad Social Corporativa. Y digo por fin porque no se ha hecho ligero: ha durado 2 años y no han sido pocas horas y pocos disgustos.
El objetivo de este blog no es hablar sobre mí, sino tratar de ayudar a otros que están emprendiendo un proyecto social o se dedican a la Responsabilidad Social, así que el siguiente post va a dedicado a todos los trabajadores sociales que me han preguntado en persona o por escrito sobre qué formación tomar después de conseguir el deseado título universitario. No han sido pocos y el tema me parece tan importante que he decidido hacer un post sólo sobre el tema.
La Formación: Master Vs Cursos de 30 horas
En este otro post sobre la importancia de la especialización defendía la necesidad de ser fácilmente etiquetable teniendo un CV coherente y claro, además de la idea de contar sólo con un master y luego cursos concretos que complementen la formación. Meses más tarde y a sólo unas semanas de obtener el título de máster en sostenibilidad y responsabilidad social corporativa, confirmo con más fuerza la misma idea: Los cursos de 30 horas ganan por goleada a los másteres en el mundo del emprendimiento social y del sentido común en general. Paso a describir mis argumentos:
Másteres
1) Primer desventaja (además fácilmente identificable): el precio. Los másteres cada vez están más caros y cuando comienzas tu propio camino profesional emprendiendo, cada euro hay que exprimirlo. Durante esta etapa de entrenamiento he visto tal cantidad de másteres y a precios tan desorbitados que me entraba la risa. Con mis amigos tenemos el chiste de buscar el máster más absurdamente caro de España. Si alguien cree saber cuál es por favor que lo escriba en comentarios y así me rio un rato.
2) Experiencia de los profesores: Lamentablemente, como todos sabemos, el mundo social se ha devaluado hasta tal punto que los profesores de los másteres sociales en ocasiones, no han trabajado nunca ni de lejos en el mundo social y suelen estar de profesores porque se han pasado años de becarios en la universidad o tienen un buen contacto. Ejemplo práctico: fulanito estudió administración de empresas, hizo un doctorado en finanzas y ahora a clases sobre discapacidad en la empresa en el máster de RSC que vale 7000 euros. Conclusión: tal vez tengamos buenos temarios bien documentados pero el profesor normalmente no se “moja” en el tema: no te aporta nada que no puedas encontrar por internet en unas horas.
3) Atención de los profesores: Esta es una triste realidad que he descubierto este año (al menos en mi máster online) los profesores apenas se han comprometido conmigo como alumna, les daba igual si suspendía, no me presentaba a los exámenes, o si me iba a dar un infarto porque mi tutora del TFM de repente desaparece dos meses sin dar explicaciones. Siempre con la sensación de que me están haciendo un favor por atenderme, en vez de tratarme como lo que soy: una clienta y alumna en sus manos.
4) Tiempo: ¡qué importante es el tiempo! Un máster obviamente te quita mucho tiempo y eso debes valorarlo.
Ventajas: suena mucho mejor y queda más bonito en el CV. También son más horas de formación y tal vez de buena calidad si los profesores son decentes. Aun así alguno no lo será y tendrás que pagar por esa asignatura tanto como por la que merece la pena. Yo no desaconsejo estudiar un máster, pero si hacerlo con cabeza y no más de uno (a no ser que te lluevan los billetes verdes y dudo que esa clase de personas lea mi blog)
Ejemplo real: Rocio Cáceres Damas, reconocida profesional de la intervención social con Alzheimer, no cuenta con ningún máster en Alzheimer sólo años y años de experiencia y estudio autodidacta. En vez de dedicar sus recursos (tiempo y dinero) a estudiar un máster los dedicó a crear el Centro Atrade en Sevilla, el primer centro de atención temprana en Rehabilitación Cognitiva que se conoce.
Cursos/Congresos/Jornadas de 30 horas
Son los cursos a los que me refiero a la hora de completar el CV. Para mí, los ideales:
1. Precio: normalmente baratos, nunca vas a pagar más de 500 € por ellos. Muchos están subvencionados por organismos públicos o son parte de tu formación en la ONG para la que trabajes.
2. Experiencia de los profesores: Esto es lo mejor. Normalmente son grandes profesionales con prestigio en su campo y muy especializados. Nunca verás a fulanito doctor en finanzas dando un curso de este tipo, porque aquí los contactos poco importan, importa la trayectoria y prestigio profesional del formador.
3. Atención de los profesores: toda la posible. El curso puede ser presencial u online (mejor si es presencial) pero el formador te hará mucho caso ya que es su prestigio como formador lo que está en juego. A fulanito doctor en finanzas le da igual lo que pienses sobre su forma de impartir el máster. Nada de lo que pienses alterará su trabajo ni reputación en la universidad, en cambio, el formador de 30 horas trabaja prácticamente por el boca a boca y recomendaciones. No tienen una gran institución de la que es empleado para respaldarle. Lo da todo en sus cursos y se preocupa de cómo le ven sus alumnos, que son clientes. Lo mejor es que puedes contactar con ellos por correo electrónico o por teléfono para preguntarles dudas sobre la aplicación del curso en la vida real. Lo normal es que te atiendan aunque hayan pasado 5 años. De esa forma no sólo obtienes el curso, sino también la posibilidad de plantear dudas al formador siempre que quieras.
4. Tiempo: poco, 30 horas. Y lo repito. Para emprender, el tiempo es clave.
Desventajas: al igual que el máster, el curso te añade líneas en tu CV pero no es tan vistoso. Hay reclutadores que les importan mucho los títulos y a otros más las competencias reales de la persona. Saber con quién quieres trabajar te facilita escoger en este tema. En ocasiones existen cursos con mucho status en tu sector, ya sea por el formador o por la dificultad de entrar en ese curso concreto.
Ejemplo Real: yo misma: Cuando trabajaba en Save The Children me planteé seriamente hacer un máster sobre intervención socio-educativa con infancia y juventud, sin embargo, en la ONG me regalaron un curso de 30 horas sobre la metodología Golden 5. Aprendí tanto que dejé la idea de hacer el máster y desde luego aprendí más que en la carrera. Además, de vez en cuando escribía a la formadora para preguntarle dudas sobre los casos difíciles en los que me encontraba en mi trabajo diario. Para mí fue un antes y un después en mi carrera profesional como educadora social. Y no sólo en mi caso. A día de hoy mis compañeros de la ONG piensan igual. La metodología Golden 5 nos cambió como educadores sociales y fue un curso que nos salió gratis y duró sólo 30 horas.
Elegir bien la formación
Cuando se empieza un proyecto con ilusión, ya sea de empleabilidad o de emprendimiento aparece ante nosotros un amplio listado de opciones, cada vez más grande y apetecible. Escoger bien nuestra formación es un paso importante porque nos quitará nuestros dos recursos más escasos: dinero y tiempo. Durante estos de años de “entrenamiento” he preguntado a profesionales a los que admiro del campo social y no social, qué formación supuso un antes y un después en su carrera profesional. Curiosamente, los testimonios sobre los másteres fueron en mayoría negativos por diferentes motivos (o directamente indiferentes) mientras que la mayoría (yo misma incluida) se habían sentido más inspirados en formaciones cortas ya fuesen congresos, jornadas o cursos elaborados por expertos. Por lo menos me han interesado 10 másteres y expertos de diferentes campos y me seguirán tentando toda mi vida. El Pepito Grillo de la “titulitis” no me dejará en paz nunca, porque la verdad, afortunadamente, el mundo nos ofrece tal cantidad de formación maravillosa que cuesta resistirse a sus encantos. Por ello, utilizo esta serie de ítems antes de decidirme a apuntarme a una formación, ya sea gratis o de pago:
Uhmm…este tema me interesa..
¿Necesito un TÍTULO O CONOCIMIENTO?
- Preguntate:
¿El título es imprescindible para ejercer AHORA?
¿Quiero ser el profesional más increíble sobre la faz de la tierra en este tema?
Si –> Haz un máster o experto
No –> Entonces necesitas conocimiento
2) A la hora de elegir un título cuando tienes claro que necesitas para ejercer AHORA y quieres ser un superprofesional en el tema ten en cuenta lo siguiente:
¿Tengo dinero para pagarlo?
¿tengo buenas referencias de él?
¿Puedo dedicarle tiempo?
¿Quiénes son los profesores? ¿tienen una buena trayectoria?
¿Cómo son las condiciones de esta profesión?
Encuentra al menos tres personas que hayan hecho ese máster o experto y pregúntales que han conseguido con ese título.
3) A la hora de elegir las distintas formas de conocimiento:
¿Qué me apetece ahora mismo? Podemos elegir entre leer un libro sobre el tema que te interesa, asistir a un congreso, jornada etc o apuntarnos a un curso corto sobre el tema. Yo elegiría en función del tiempo, interés y cantidad de dinero.
– Pocos Recursos: Libro
– Mediano: Evento
– Mucho: Curso online
– Muchísimo: curso presencial
Y este es el mecanismo por el que yo escojo la formación que voy a cursar, espero que con esto responda a todas las preguntas sobre el tema.
¿y vosotros? ¿con qué criterios escogéis vuestra formación? ¿ha existido un curso o máster que os ha cambiado como profesional? Me encantaría saberlo
Nota 1: En realidad este post trababa sobre mis aprendizajes como emprendedora social en los últimos dos años, pero el tema de la formación ha salido tan a menudo en preguntas y conversaciones con compañeros que sin querer ha crecido y ha protagonizado el post. No pasa nada, para otra ocasión.
Nota 2: También tengo que decir que es fruto de mis reflexiones sobre mi papel como formadora en el tema de la Responsabilidad Social. La verdad es que ha sido una sorpresa tener tanta demanda en este tema y eso me ha hecho replantearme qué clase de formadora quiero ser. Sobre el curso que voy a impartir online el próximo mes hablaré en el siguiente post.
Hola Almudena, muy buena y esclarecedora reflexión, vaya paradoja que sea frecuente que los profesores de los másteres sociales no hayan trabajado nunca en el mundo social, para mi no hay mejor master que la experiencia del ejercicio profesional. Te deseo mucho éxito en tu nueva etapa
Hola Carmen! gracias por comentar. Si, es algo bastante normal en cualquier máster que nunca hayan ejercido como profesionales. Yo tampoco lo entiendo. Si en el grado me parece negativo en el máster aún más. Muchas gracias por tus buenos deseos, un beso : )
Almudena, me ha gustado mucho tu reflexión sobre la formación. Me parece un tema muy importante a tratar, y no sólo respecto a la formación de posgrado, sino también la formación de grado . Es necesario que los y las profesionales de lo social (que nos manejamos en una realidad tan cambiante y compleja) nos introduzcamos poco a poco en ámbitos más académicos, para compartir nuestras experiencias y trayectorias, desde lo más valioso que podemos aportar: lo que hemos vivido, aprendido y crecido.
Dar clase en la Universidad no es fácil, sobre todo introducirse en este ámbito. Sin embargo, todavía estamos unos y unas cuantas profesionales que no perdemos la ilusión y esperanza de que nos permitan compartir desde nuestro saber y hacer con las personas que están en periodo de formación.
Muy acertada tu entrada, Creo que aportas puntos de luz fundamentales, desde tu experiencia. Un abrazo!
Hola Inma! que comentario tan bonito gracias. Imagino que por lo que cuentas estás tratando de abrirte camino en el mundo académico…la verdad es que conozco poco de ese mundo, salvo que me fastidia los profesores y profesoras con poco interés y experiencia laboral real. Cada vez confio más en los formadores artesanos y por lo que sé de tu trayectoria tendrías mucho que compartir como formadora ¡mucho ánimo! al final de momento, nadie ha recomendado un curso por aqui ¿alguno que nos recomiendes?
Un abrazo!
Querida Almudena, con un par de Másteres en cartera… te recomiendo que te pongas las pilas en INGLÉS y que te vayas un año a Inglaterra o Escocia. Yo lo hice, y no te imaginas el baggage que me ha dado… no lo dudes, es una opción muy buena 😉
Hola Inma! me has leido la mente jajaja justo ahora mismo es mi objetivo 100% este año he cogido a varios alumnos en prácticas en ADRES para que me ayuden y así poder dedicar más tiempo al inglés e incluso irme fuera un tiempo mientras dirijo ADRES en la distancia. Muchas gracias por el consejo, me reafirmas! Un beso muy grande
Hola Almudena,
muy bueno que compartas aquí tu experiencia.
Creo que estamos algunos, también por comentarios que voy leyendo por las redes sociales, bastante escépticos en este tema. Personalmente, he gastado dinero en formación y mis esfuerzos han sido en vano porque esa formación no me ha dado unas competencias empleables. Un amigo mío dice que las cosas no se consiguen con deseos sino con habilidades. Así que eso es lo que me gustaría: cursos que te den unas habilidades, que no sean solo teoría, porque sin saber hacer nada no te contrata nadie ni te puedes montar nada por tu cuenta.
Besos 🙂
Hola Carolina! gracias por pasarte por aqui : ) totalmente de acuerdo con lo que dices, por eso pienso que es importante elegir bien el formato de la formación y el formador. Nuestro tiempo y atención es sagrado. Yo también tuve una época de activa titulitis por eso creo que sé de lo que hablo. Especialmente somos vulnerables los que nos dedicamos al mundo social. ¡hay tantas opciones y desempleo! en cambio invertir en idiomas siempre da resultado. Mucho ánimo con los nuevos retos compañera! un besote
Muy, muy interesante tu entrada sobre la formación. Se la haré llegar a mis alumnas para que se vayan aclarando. Muchas gracias por la mención, si que es cierto que la experiencia es un grado, en mi caso sin mis años de experiencia me hubiera sido imposible abrir Centro Atrade
Hola Rocio! esperaba verte por aqui : ) me has parecido un ejemplo perfecto de lo que quería transmitir. Imagínate que antes de ponerte a crear el Centro Atrade te hubieras hecho un máster de Emprendimiento y otro de Alzheimer…ya a las alturas en las que te mueves tu deberías ser profesora de estos temas y no alumna, aunque sigas formándote cada día. Se nota que confias en ti misma y eso es fantástico. Gracias por recomendar mi post. Nos vemos por el Colegio próximamente!Un besote
Aquí pone que un máster llegó a costar 95.000 euros! Tremendo! Yo ahora voy a hacer el Grado de Trabajo Social a través de la UNED pero MUY poco a poco por el tema económico. Luego sí que me gustaría hacer un máster, pero siempre está el problema económico así que no sé si alguna vez lo podré hacer. Yo veo muy complicado eso de especializarnos en Trabajo Social, ya que te suelen pedir formación al respecto y, tal y como está ahora el trabajo para l@s jóvenes en nuestros país, mucha experiencia sobre un campo en concreto es difícil de obtener y de acreditar. Esto pasa, sobre todo, si trabajas en empleo público como interina, como es mi caso. Me encantaría lanzarme al mundo privado o del emprendimiento pero: en el primer caso sólo veo sueldos basura y trabajo precario y en el segundo…¡no se me ocurre nada! y, además, no tengo un duro. ¡Gracias!
*aquí: http://www.expansion.com/2011/04/04/empleo/desarrollo-de-carrera/1301940024.html